"Él dijo que esa pregunta se la hacía todos los días: para qué servía la utopía, si es que la utopía servía para algo. Dijo: Porque fíjense ustedes que la utopía está en el horizonte y si está en el horizonte yo nunca la voy a alcanzar, porque si camino diez pasos la utopía se va a alejar diez pasos; y si camino veinte pasos la utopía se va a colocar veinte pasos más allá. O sea que yo sé que jamás -nunca- la alcanzaré... ¿Para qué sirve? Para eso, para caminar"
Vivir sin miedo
Eduardo Galeano
Etimológicamente, la palabra utopía tiene su origen en griego y se refiere a un lugar que no existe. Una utopía "Es la cristalización de los pensamientos individuales innovadores más allá de los límites".
Los arquetipos imposibles de alcanzar; ideales sumamente lejanos, son conocidos como utopías, ilusiones.
En cuanto a la realidad, se basa en razonamientos y verdades; asimismo de relaciones y estructuras sociales, donde se forman identidades individuales. Todo esto a través de conocimientos adquiridos por un conjunto de personas.
Qué mejor manera de inspirar utopías, que basándose en la realidad. Y una alternativa para construir la realidad social es fundamentándose en ideales inalcanzables: utopías.
Aunque la realidad se encuentre disociada de utopías, esta la impulsa a un desarrollo constante.